jueves, 9 de enero de 2020

TEODORO HERNÁNDEZ (MANCHAS Y RUIDO # 7)









(Originalmente aparecida en Manchas y Ruido #7).

Teodoro Hernández es uno de los artistas más personales del planeta y uno de los ejemplos más brillantes de perseverancia y personalidad al margen de modas y tendencias, incluso dentro del punk, una cultura que supuestamente va a la contra, y que demasiadas veces parece una industria cualquiera. 

Teodoro ha tocado en algunos grupos ya míticos: Sida, Destrucción, Otan, Firmeza 10, Infierno de Cobardes, Cisma, Ciemo, Irreparables...Lleva el sello Alta Intensidaz desde su Arnedo natal, realiza el programa de radio-podcast Hardcore Radikal, y lleva más de 20 años publicando su tremendo fanzine Miguel/Eskupe Al Alkalde, una joya impresa que ha sido y sigue siendo inspiración para muchísima gente. 

Siempre había tenido curiosidad por conocer detalles de su faceta gráfica, por lo que esta extensa entrevista está centrada en su increíble arte salvaje. 

http://www.altaintensidaz.com/




1. Hace muchos años, leí una entrevista tuya en un fanzine llamado “Ojalá te mueras” donde contabas que habías estudiado en una escuela de arte durante unos años de tu vida. Es algo que yo nunca hice y que siempre me ha dado mucha curiosidad, ¿podrías contarme cómo fue la experiencia y de qué te sirvió?

Asistí a dos escuelas de arte para hacer lo que antes se conocía como Formación Profesional. Fue idea de mi madre, durante EGB me expulsaron de dos escuelas de primaria y no me dejaban repetir para obtener el graduado escolar, si quería seguir estudiando solo me quedaba la posibilidad de hacer una F.P. En ese momento tenía 14/15 años y pese a vivir en un pueblo donde los talleres admitían a “niñxs” de cualquier edad para ser explotadxs, no estaba en los planes de mis padres que me encontrara en esa tesitura laboral.
Ya dibujaba desde que tenía uso de razón. Mi madre lo adoraba y se enteró de que en Logroño había una Escuela de Artes y Oficios, me animó a matricularme conocedora de que muchas de sus asignaturas plásticas serían más estimulantes para mí.

Hice primero, segundo y lo que sería tercero de FP en esa escuela, que ya empezaba a llamarse grado medio. Cuarto y quinto en otra escuela de Barcelona. Mis primeros años en Logroño fueron inmejorables, más que por lo académico porque me encontré con un lugar donde “no había bulling” y los profesores no te amenazaban, ni expulsaban, ni pegaban, (en Arnedo, muchxs de lxs profesores te pegaban ostias hasta derribarte). Llegar a un centro donde había un director y profesorxs que se consideraban anarquistas y sabían que era el punk me parecía un sueño. En el salón de entrada había un mural hecho por Txiki Trepax dedicado a todos los insumisos presos y en busca y captura. 



(El primer Eskupe Al Alkalde que compré).

Empecé a formar parte de en un colectivo anarquista llamado Zizaña y muchxs de sus miembrxs íbamos a ese centro, en mi clase llegamos a estar tres de nosotros, hicimos algunas actividades pro insumisión en la propia escuela, vimos allí varios conciertos de punk y ska, hacíamos un Fanzine punk llamado La Ratilla que lo financiaba esa institución. La segunda vez que me cachearon en mi vida fue en la entrada de la escuela, éramos menores de edad y la policía consideraba que podíamos portar propaganda contra la monarquía. Y además de todo esto conseguía estudiar y lo pasaba bien en muchas de las clases donde el dibujo, la pintura y el volumen eran lo importante. Como ves no he escrito mucho sobre la experiencia artística, lo que recuerdo profundamente es pasar de un entorno muy opresivo a otro donde mis profesores nos permitían vivir mejor y donde muchxs de mis compañerxs eran gente estupenda.

Cambié mi forma de dibujar y pinté mucho, principalmente contagiado por mis compañerxs de clase más aficionados al cómic, que nos juntábamos para hacer fanzines como La Ratilla, Zizaña, El Kojón Revolucionario o Mi Primera Vivlia. Ahora sería mucho más crítico con la relación politica profesor-alumno y la manipulación a través de una pedagogía más permisiva de esxs nuevos maestrxs, pero dame el adoctrinamiento de Nelly en La Escuela de Artes y Oficios y quítame las palizas de don Esteban en el colegio Antonio Delgado Calvete (El nombre del centro era el de un antiguo director y reconocido por algunos de sus alumnos como pederasta).

2. Tus dibujos y cómics han cambiado muchísimo desde tu etapa como “elreydespaña”, ahora me parecen mucho más viscerales, crudos y, quizás en cierto modo, autobiográficos (aunque no puedo estar seguro de esto, es mi sensación). Tus cómics ya no son chistes, el humor es mucho más sutil y el estilo es minimalista, expresionista y salvaje. ¿Este cambio coincidió con tu abandono del pseudónimo “elreydespaña”? ¿Fue algo premeditado y consciente o sucedió de una forma natural? ¿Por qué usabas el nombre “elreydespaña”? ¿Te sientes todavía identificado con esos cómics y dibujos?

En esa escuela de Logroño había un concurso anual llamado Muestra de Artes Graficas. Tenía tres apartados: Cómic, pintura y escultura. El concurso de cómic lo ganaba sistemáticamente cada año Egea, que era al mismo tiempo que un tipo muy simpático, un dibujante extremadamente perfeccionista y talentoso, sus páginas a plumilla y cepillo de dientes eran impresionantes y todos los años se llevaba el premio, pues su virtuosismo era imbatible para el jurado. Otros, que éramos unos cutres dibujando nos presentábamos cada año sin esperanza ninguna y lo que nos quedaba era la risa, así que hacíamos cómics gamberros y con un estilo lo más minimalista posible, como provocación y respuesta a Egea. Para firmar estas páginas era menester buscar un nombre pretencioso y absurdo, "Elreydespaña" nos hacía gracia a los amigos y así se quedó por algunos años. Los inicios eran chistes fuertes, escatológicos, fálicos e irracionales. Lo pasé muy bien hasta que me aburrí.



Ocurrió a lo largo de esos años que algunas amigas y parejas se sintieron incómodas en mas de una ocasión con el contenido, también había empezado una gran explosión de cómics muy incorrectos. En el Saló del Còmic se me acercaba gente que consideraba que yo era buscador de drogas, putas y desfase y me empecé a sentir incómodo con esto.

No todos los cómics de Elreydespaña jugaban a la provocación de lo violento, lo sexual, lo escatológico, pero sí que al parecer, algunxs lectores leían una identidad en esto más que en lo absurdo, y lo absurdo era mi mayor pretensión. Pienso que el aburrimiento y la repetición me hizo querer buscar otra forma de expresarme. Me importaba una mierda si solo yo entendía lo que dibujaba, pero quería (tal vez sin lograrlo) que mis paginitas transmitieran un mundo diferente, que era el que tenía en la cabeza y en la vida, como una incomodidad de existir. 

Dejé de firmar así porque consideraba que la broma de Elreydespaña se había acabado, y terminar las páginas con mi nombre me sonaba raro e incluso más pretencioso que Elreydespaña. Por otra parte las pocas personas a las que mis cómics llegan ya saben que son míos sin necesidad de firma.
Con respecto a si me siento identificado con ese periodo... Sí, supongo que sí, me hacen mucha gracia algunas de esas historietas, sobre todo me encanta pensar en la necesidad que tenía de dibujar tantas y tantas páginas cargadas de aberraciones. Era yo, y sigo siendo yo, y parte de mi humor es así de estúpido pero ya no me apetece ni necesito compartirlo con todo el mundo. O simplemente quiero compartir otras cosas, las que hago ahora, que tampoco son tan opuestas.

3. Aunque nunca has hablado mucho en tu fanzine ni en tus entrevistas de tebeos o dibujantes, yo conocí al gran Tamayo, a Pushead y la revista Weirdo gracias a tus menciones hace ya un millón de años. ¿Podrías decirme qué es lo que te impulsó en un principio a dibujar tebeos? Tengo curiosidad también por saber si hay actualmente dibujantes que te inspiren o si estás interesado de alguna manera en el arte y el cómic. 

De nuevas ediciones que tienen que ver con el cómic o la ilustración, solo estoy al tanto de lo que intercambio con gente con la que me escribo. En cuanto a fanzines… me gusta mucho todo lo que tú haces Jose, me parece tan incómodo como bonito, me parece tan deseable de compartir como difícil de recuperar. 
Me ha gustado mucho el último fanzine de Nacho García con dibujos de su madre, también Fuerzas Absurdas de Andrea Galaxina me parece fabuloso, me encanta su trazo roto, sus viñetas enormes y sus historietas, que al menos en mi pueblo creo que no le interesan a nadie pero en las que retrata un mundo único, el suyo, lleno de sucesos “galaxinos”. Y como no, el fanzine Que Suerte, la mejor publicación para conocer a lxs autorxs más interesantes del momento.

No hablo mucho de cómics con nadie porque no tengo ni idea, o al menos, en este momento en el que es fácil encontrar mucha información de algo concreto y adquirir muchos conocimientos, yo no tengo esos deseos de sabiduría, ni creo que mis recomendaciones aporten demasiado. 

No me atrae leer tebeos tanto como antes, no encuentro el momento de empezar a leer uno, pero fíjate que a raíz de tu pregunta he abordado días después algunos que tenía pendientes. Siento que las cosas que he leído últimamente están al alcance de todo el mundo y son muy conocidas pero las he disfrutado. He leído Pitopausia de Ralf König, que siempre me entretiene mucho este autor. 
Te cuento también que desde hace tiempo y con el volumen tan enorme de edición de libros en el estado español, y el detrimento de mi curiosidad, he decidido poner más atención en lo local, y aquí en La Rioja no hay mucho pasando, pero editoriales como Fulgencio Pimentel y Pepitas de Calabaza tienen más capacidad de edición que yo de leer, así que lo que me ha encantado en estos días de Fulgencio ha sido: Arsène Schrauwen, los volúmenes de Simon Hansselmann, y el último de Julie Doucet, supongo que es lo más accesible, también me ha gustado muchísimo el dibujo de Nubes de Talco y el de Jay & Kay pero no conecto con las historietas. Buf, y de Pepitas: “Enorme Suciedad” me ha parecido fabuloso, Maite mancha el papel envidiablemente, y construye unas historias suciamente depresivas muy devorables.

Por otra parte me he leído las viñetas de Rafael Azcona y Mingote, dibujadas en los años 50 y publicadas respectivamente en “Repelencias” y “Pequeño Planeta”, que me han hecho disfrutar mucho. El primero retrata de maravilla esa España de respeto a los mayores, temor a Dios y sumisión a la autoridad, el Madrid de las zanjas y socavones, los suburbios chabolistas y la decadencia de lo taurino. Claro, todo muy sutil, muy pendiente de la censura y la sanción o lo cárcel, pero consigue mostrar como indeseable en esos años cincuenta al niño que los maestros de esa época consideraban ejemplar.
De “Pequeño Planeta” me gusta mucho ese respirar común de una posguerra donde casi todxs tenían vacío el bolsillo y el estómago, y ver, como durante el régimen franquista se pulía la intención y el ingenio para expresarse sin ser advertido por la censura, en palabras de Mingote: “La censura condicionó el desarrollo del humor español podándole las ramas, por eso ha permitido que crezcan más. En la época de la censura más rigurosa no se pudo hacer humor político, pero se fustigaron la cursilería, la seriedad asnal, la pacatería desenfrenada, la burocracia, los enriquecimientos sorprendentes, la anormal pasión deportiva...”. Algo que nos deberíamos plantear en estos tiempos donde conviven los mundiales, la corrección política, la idiocia más cruel, y aquí estamos paralizadxs sin lanzarnos afilados a esas yugulares.

Mi impulso a hacer dibujos y viñetas viene de cuando era muy pequeño, mi madre siempre me recuerda dibujando. Era un niño que odiaba el futbol y amaba dibujar. El resultado era algo feo, cutre, mal, pero lo intentaba hacer lo mejor posible. Aún hoy lo intento más sabedor de mis limitaciones.

Me encantaba leer cómics, en el quiosco del pueblo y en la biblioteca estaban los Mortadelos, los Zipi Zape, los Pulgarcito y Superlópez, no llegaba otra cosa. Eso me acompañó años junto con el suplemento de ABC donde Gila dibujaba sus menesterosos y Chumi Chúmez sus calaveras. Buscaba en cada publicación dibujos, supongo que para mí era lo más sensato entre tanta letra. Después encontrarme con Makoki, El Jueves y los viejos Papus que ya no se editaban más, me hizo conectar con dibujantes atroces para el arte establecido como Ja, Ivá o más tarde Tamayo, autores que me daban alas para hacer cositas muy simples, donde la historia que contar era más importante que la virtud del dibujar.
Pushead y el Simon Gane del fanzine Arnie eran de gusto obligado si estabas en el punk. Y Weirdo, Raw o Rip Off Comix los descubrí por mi amigo Naxo, nunca me he adentrado mucho en sus páginas, no tengo ni un ejemplar en casa, pero pasar sus hojas era un jarro de inspiración imposible de encontrar ahora. Lxs autorxs más reputados del comic primermundista actual vienen de sus páginas, como muchxs sabréis.



(La inspiración para escribir Manchas y Ruido).

4. Creo que hay un proyecto de libro de dibujos para la increíble editorial Pepitas de Calabaza. ¡Tengo muchísimas ganas de ver eso materializado! ¿En qué va a consistir el libro exactamente?

Sí. Aunque la superstición anuncia que es mejor no hablar de proyectos si estos no se han materializado todavía… Diré que si se edita será por razones de peso y si finalmente no ocurre es porque no podía ser de otra forma. Tengo la fortuna de conocer a los Pepitas desde que éramos fanzinistas y “distribuidores alternativos” y hay una amistad preciosa. 

El contenido del futuro librito siempre está modificándose, tendrá material viejo ya publicado, pero que se pensaba era adecuado rescatar y algunas o muchas (depende de la selección final) páginas nuevas, se piensa en unas 250. Pero esto puede cambiar o extinguirse en cualquier momento ja ja. Solo sé que está siendo muy grato compartir el proceso con Víctor y Julián.

5. El otro día, Olaf me dijo que lleva 25 años publicando su fanzine Que Suerte. Yo llevo 12 años haciendo el mío y creo que así seguiré hasta el día que me muera. ¿Cuánto tiempo llevas publicando “Eskupe Al Alkalde/Miguel”? 

En 1996 salió el primer número. Me parece muy bonito leerte esa seguridad sobre la continuidad de tu importante fanzine. Deseo lo mismo para el mío, seguir poco a poco, y cuando me apetezca editar un número. 

Añado como fanzine legendario, inspirador y muy poco correcto a “Suburbio”, hecho en Barcelona por el perseverante Naxo Fiol, desde 1993 si no me equivoco, y con 67 números hasta la fecha.




6. Hace años sacaste algunos álbumes de cómics Subterfuge y Doble Dosis. No has vuelto a publicar “profesionalmente” desde entonces, ¿verdad? ¿Esto es por algún motivo concreto o simplemente no se han dado las circunstancias?

La última editorial que me auspició fue la revista Karma Dice de Bilbao, con ellos, Subterfuge y Doble Dosis siempre he tenido un trato estupendo y guardo muy buen recuerdo. Pero los álbumes publicados los observaba meses después de ser editados y siempre había algo que no me funcionaba, años después los aborrezco completamente, no el contenido, pero si la forma. Sin embargo, releer los fanzines es siempre grato, en muchos casos pienso que ya no volvería a escribir esto o dibujar aquello pero me gusta y me parecen un fiel reflejo de mi sentir. Por eso decidí dejar de publicar con editoriales y disfrutar de mis fotocopias. 

El volver a La Rioja y reencontrarme con Julián y Víctor me hizo cambiar de opinión, pienso que tenemos mucha afinidad en el resultado de las cosas que manufacturamos, así que vamos a ver cuando y como sale esta aventura.





(Clásico del punk moderno). 


7. Una de las cosas que más me interesa conocer de la gente que me gusta e inspira es su proceso creativo. ¿Realizas algún tipo de guión/esquema antes de dibujar tus historias? En los diseños de tus discos y cassettes la línea es muchísimo más agresiva que en tus tebeos, ¿qué tipo de herramientas usas para dibujar?

Tengo una libreta en la que apunto ideas de cómics cuando no tengo tiempo de dibujarlas inmediatamente. Hay ocasiones en las que hay un boceto anterior, tanto en los cómics como en las ilustraciones, pero normalmente no es así. 

Desde hace muchos años tengo un problema con imitar la idea primigenia, cuando hago un boceto me parece tan fresco y tan inmediato que luego, al querer imitarlo para mejorar nunca lo consigo, casi siempre prefiero el boceto que su progresión, así que suelo hacer casi todo definitivo, otra cosa es que dibuje un montón de ideas diferentes para una misma propuesta, sobre todo si me piden una portada. Lo que si hago a veces son correcciones en la página, con tipex o cortando y pegando papel. 

Había un ritual extraño en mis primeras páginas que se basaba en comprar un buen papel y dibujar con plumilla de una forma lo más inmediata posible pero intentando cuidar el trazo al máximo, esto me acababa atormentando, soy un tacaño y no quería estropear el papel, desgastar demasiado la plumilla, y tener que encontrar otra que modulara igual de bien me creaba inseguridad.
Me he dado cuenta de que necesito comodidad y libertad, así que uso materiales de mierda, porque sé que soy un tacaño y un conservador, y si dibujo con algo valioso no voy a tener libertad de ejecución. Así que aunque he pasado años dibujando con plumilla hora uso material muy barato, bolígrafos de tinta líquida, unos del ALDI, de hecho pruebo todos los bolígrafos que venden en ese supermercado y suelen darme buenos resultados. Y pincel convencional para acrílicos y tinta china.

Papel suele ser de carteles satinados reciclados o páginas de 80 gramos. No voy de basurillas, simplemente que mi psicología no me deja ser libre con material valioso. La plumilla me gusta mucho pero no la uso desde hace años, en el bolígrafo he descubierto nuevos trazos que me gustan mucho.

En los discos y cassettes me da la sensación que al salir de la viñeta hay mucho más espacio para manchar, así que uso más el pincel, que permite emborronar más superficie.




8. Has hecho muchísimas portadas y carteles para muchos grupos punks. Cuando haces algo para otra gente, ¿bajo qué condiciones lo llevas a cabo?

Desde hace tiempo las condiciones suelen ser: hacer lo que quiera y que ellxs a cambio me den lo que quieran. Porque otro problema que tengo es que si hay algo concreto en juego me colapso, y si se espera de mi un determinado estilo o contenido en lo que voy a hacer, me colapso más todavía. Todo aquello de lo que me siento más orgulloso es en lo que no ha habido dinero en juego.





9. En tus últimos fanzines y cómics se detecta un desencanto con “el movimiento punk” (o como quieras llamarlo), sin embargo, en tu programa de radio das rienda suelta a tu entusiasmo por decenas de proyectos relacionados con este universo. Creo que a mí me pasa algo parecido...el punk cambió mi vida y me dio una voz cuando yo no la tenía, pero a la vez siempre he detestado sus dogmas, uniformes y jaulas mentales.  ¿Qué te inspira y qué te desmotiva de esta comunidad? 

Al contrario que tú, y en contradicción con algo de lo comentado anteriormente, yo tiendo a ser dogmático, uniforme y me gustan los límites y las jaulas, porque tengo miedo del exterior y para mí el punk ha sido un lugar donde hipertrofiar todas estas cosas horribles. Creo que el punk, puede acompañar muy bien estos pensares, por eso se ha convertido en una caricatura de sí mismo. Cada sector del punk está ahí diseñando su propia bandera y haciendo un punk verdadero en contraposición con el otro falso. El punk autodestructivo se reivindica como el necesario, la respuesta natural a una opresión social y declara “punk y muerte”. El punk anarco se reivindica como el imprescindible, la respuesta única a una opresión construida política y cultural y declara “punk o muerte”. Estas son dos de las muchas propuestas que algo tan inacotable como el punk mantiene, y me da empuje en esa idea que tengo yo del Ellos y el nosotros. Cada unx juega y modifica el punk como le da la gana, de una forma a veces muy perversa.

En estos días, en occidente ya no hay capacidad para volver a lo subterráneo, cada vez es más difícil llevar a cabo proyectos autónomos que no sirvan al capital. Demasiado tiempo de ocio que estimula que todo lo que ocurre sea susceptible de monetizar. Muchxs vendedorxs y compradorxs por todas partes.

Es muy difícil luchar contra lo establecido desde el punk porque gran parte del punk tiene lugar y soporta lo establecido. O se justifica lo existente o se es revolucionario. Yo quiero que sea siempre revolucionario, sin embargo me da la sensación que el punk, ayuda a encajar la rebeldía en todos los nuevos surcos que va labrando el capitalismo. Como movimiento social ha pasado a ser algo que se acomoda a la red social. Parece que gran parte del movimiento adopta las nuevas necesidades que crea el sistema como si fueran propias. 

Llevamos más de 40 años de punk y me planteo si es una herramienta social, o pura repetición, ¿o tradición, hábito, kistch, incapacidad para ser otra cosa que capitalismo?.
Pienso que solo nos queda ser hipercríticos con el punk, no puede ser de otra forma con un movimiento en el que parte de su fuerza más visible, ha permitido que fuera representada a través del consumo y la estética. Igualmente tengo la confianza que no está todo hecho ni terminado, que la catarsis sucede, y sucede verdaderamente, el punk es peligro también, es emancipación, es algo que nos produce este debate, con lo cual no ha finalizado del todo, nos ha transformado, nos inspira, nos frustra. Odio ser tan ambiguo, pero ¿qué otra cosa hacer en este caso? Sabemos que el punk no está terminado, sabemos que hay mucho que romper todavía.

Quiero luchar contra un movimiento que cada vez tiene en sus filas a más fans y menos, menos... ¿cómo llamarlos?, ¿cómo llamarnos?, no me gusta decir activistas, ni militantes, ni mierdas de esas... digamos mamíferos pensantes, incómodos, intolerantes, amantes...
Esto es lo que me inspira, saber que sí, definitivamente hay valiosas personas que se preocupan por quien tienen al lado, que intentan poner límites al deshonor, combatir la bajeza del ser humano y denunciar nuestra mala conciencia. Quiero pensar que algunos de estos valores han sido también contagiados y pensado en el punk, y por eso permanezco, siempre hay alguien que demuestra que lo punk merece un esfuerzo más, o muchos más.

10. Muchas gracias por tu tiempo, Teodoro, si quieres añadir alguna cosa este es el lugar.

Gracias y gracias a ti Jose por ser una de esas muestras de punk incontrolable, de esos mamíferos que machete en mano van descubriendo camino en urbes donde la desanimalización, la desconsideración, la repetición y el deshonor nos hacen cada día más idiotas.



1 comentario:

Anónimo dijo...

escuchar al Teo hablar de deshonor da miedo